Por Nta. Francisca Vidal.
Ya sabemos, te aburre comer siempre lo mismo cuando estas a dieta, y más aún cuando una de las pocas cosas dulces posibles de consumir en cantidad libre es la gelatina diet. Aquí te presentamos una manera distinta de comerla, pues todo entra por la vista!
Melón con Gelatina
Ingredientes:
•4 tazas de agua
•1 sobre de gelatina sabor a elección
•1 pieza de melón lavado y desinfectado.
•5 piezas de frutillas lavadas, desinfectadas y cortadas en rebanadas.
•5 piezas de frambuesas lavadas y desinfectadas.
•5 piezas de cereza lavadas y desinfectadas.
Preparación:
1.En una olla calienta el agua, cuando rompa el hervor agrega la gelatina y mezcla bien hasta que se disuelva por completo. Retira del fuego y deja enfriar.
2.Corta el melón por la mitad, retira las semillas y un poco de la pulpa, la cual debes reservar y cortar en trozos.
3.Agrega las fresas, las frambuesas, las cerezas y los trozos de melón en el centro de cada mitad. Rellena con la gelatina de naranja y refrigera por 30 minutos o hasta que cuaje.
4.Retira del refrigerador y corta en rebanadas. Servir.
Gelatina en Gajos de Naranja
Ingredientes:
• Gelatina diet, idealmente de naranja.
• Naranja (utilizaremos sólo la cáscara).
Preparación:
• Corta las naranjas por la mitad y sácale la pulpa. Sólo utilizaremos la cáscara.
• Prepara la gelatina según las instrucciones contenidas en el sobre. Cuando esté tibia, viértela dentro de las cáscaras de naranja como si éstas fueran recipientes. Luego llévalas al refrigerador por unos minutos.
• Cuando agarre consistencia puedes cortarlas como gajos o bien servirlas así tal cual en medias naranjas. Y ¡listo!
Frutillas Congeladas a la Gelatina
Ingredientes:
• Gelatina diet, idealmente de frutilla o frambuesa.
• Frutillas Ahuecadas y desinfectadas
• Limón
Preparación:
• Lava las frutillas, desinfecta y ahuecalas para luego agregarle la gelatina.
• Prepara la gelatina siguiendo las instrucciones del envase para luego dejar entibiar un poco.
• En un recipiente coloca las frutillas y bañalas en la gelatina que acabas de preparar. Puedes adornar con media rebanada de limón. Luego colócalas ordenadas en un recipiente que puedas llevar al congelador y déjalas hasta que agarren consistencia. Puedes comerlas congeladas o bien bajarlas al refrigerador
