Por CNUT Centro de Nutrición y Terapias Naturales

Se llama activación, porque al realizar este proceso, se desactivan ciertos “inhibidores enzimáticos” presentes en las semillas o frutos secos, los que sabiamente han sido creados por la naturaleza para que estos sólo germinen en contacto con las condiciones adecuadas de agua y luz.

Cuando se presentan todas las condiciones, se activan los nutrientes que van a permitir que de las semillas o frutos secos crezcan nuevas plantas o arboles.

Además al remojar las semillas o frutos secos en agua se vuelven mucho más fáciles de digerir y las vitaminas y minerales presentes en ellos se absorben con mayor facilidad.

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¿Cómo activar las semillas o frutos secos?

1-Dejar remojando en un fresco de vidrio la cantidad necesaria de semillas o frutos secos en agua (idealmente purificada) durante 8 – 12 horas. (durante la noche)

2-Al día siguiente se elimina el agua y se enjuagan las semillas. Lo mejor es botar el agua y no consumirla.

3-Si es verano puedes dejarla secando al sol las semillas o frutos secos hasta eliminar la humedad y si es invierno las puedes poner a secar en un horno deshidratador o en un horno eléctrico a temperatura mínima.

4-Si no quieres o puedes secarlas, es recomendable dejarlas en el refrigerador en donde se van a mantener por unos 3 días. Si este es tu caso, lo mejor es no remojar grandes cantidades para evitar que descompongan.

5-Si las semillas o frutos secos se encuentran bien secos, los podrás guardar por meses, pero deben estar completamente secos, si no con el tiempo crecerán hongos.

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