Por Cinthya Cozmar, Nutricionista y Directora de Cnut.

En ocasiones, es posible que nos desviemos de nuestro plan de alimentación por diversas razones, como compromisos sociales, tentaciones o errores en la elección de alimentos. La sensación de culpa y la preocupación por los resultados pueden llevar al abandono del tratamiento dietético. Sin embargo, es importante recordar que un pequeño desliz no debe ser motivo para rendirse por completo. En este artículo, compartimos consejos para ayudarte a recuperarte después de un «día libre» en tu dieta y seguir avanzando hacia tus objetivos de salud y bienestar.

1. Vuelve al Plan: La primera recomendación es retomar tu plan de alimentación sin perder la concentración. Organízate y comienza nuevamente desde donde te quedaste. La disciplina es clave para alcanzar tus metas, y no debes permitir que un desliz te desanime. Recuerda que cada día es una oportunidad para progresar.

2. No Sientas Culpa: La comida es parte del disfrute de la vida y nos nutre de muchas maneras. No te sientas culpable por un pequeño desvío en tu dieta. La culpa no te ayudará a avanzar, y enfocarse en el sentimiento de culpa puede llevar a una relación poco saludable con la comida. Acepta lo sucedido y sigue adelante.

3. Salidas Controladas: Si decides salirte de tu plan de alimentación, intenta hacerlo de manera controlada y opta por alimentos más saludables que se asemejen a tu plan. Imagina que el desliz que cometes debe caber completamente en un plato que equivale a dos manos juntas y extendidas. Esto te ayudará a mantener el control de las porciones y evitar excesos.

4. Bebe Agua: Incrementa tu consumo de agua, preferiblemente agua pura. La ingesta de líquidos, especialmente agua, puede acelerar los procesos de tu organismo, ayudando en la digestión y contribuyendo a la desintoxicación. Además, si lo que consumiste contenía sodio en exceso, beber agua puede ayudar a reducir la retención de líquidos.

5. Realiza Actividad Física: El ejercicio es una excelente manera de compensar un desliz en tu dieta. Una rutina de ejercicios aeróbicos como bicicleta, trote o caminatas a paso rápido puede ayudarte a quemar las calorías adicionales que hayas consumido. Aprovecha esta oportunidad para reactivar tu metabolismo y volver a encaminarte hacia tus objetivos.

6. Aumenta el Consumo de Vegetales: Incorpora más vegetales en tu dieta, especialmente aquellos ricos en agua y fibra como el apio, pepino y tomate coctel. Los batidos de vegetales verdes, como la espinaca y la acelga, junto con hojas de betarraga y zanahoria, son excelentes opciones. Estos alimentos aportan fibra y enzimas que pueden ayudar en la digestión y alcalinizar el organismo.

7. Día de la Fruta: Considera realizar un «día de la fruta» en el que consumas solo frutas en cantidades libres. También puedes combinar frutas con vegetales y preparar batidos. La fruta es alta en fibra, vitaminas, minerales y agua, combinación perfecta para «resetearnos» y seguir adelante.

Como conclusión, Recuerda que la clave de todo está en la consistencia y la determinación para seguir adelante.

 

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